NW

jueves, 10 de diciembre de 2015

Cap. 5: Rebelión - El segundo grupo.

IMPORTANTE,  LOS CAPÍTULOS 5-6 SUCEDEN AL MISMO TIEMPO QUE LOS SUCESOS DE LOS CAPÍTULOS 3-4.



- -Ciudad de Nachynka- -
- -0:15 AM, 5 de Abril 2012- -

Kemono-Jū, había sido encargado de ser la distracción… Distraer a los Ángeles era cosa fácil, pero lo iba a disfrutar, después de haber atravesado el portal, llegó a la ciudad vecina de Shinwa, podía ser arriesgado pero con una bestia como esa haciendo caos era obvio que lo pondrían como su principal objetivo ignorando por completo al pequeño grupo que se había encargado de liberarlo, aunque no iban a pasar por alto el saber cómo o quienes lo liberaron, eso sería lo de menos si no lo atrapaban primero.
Ahora mismo estaba sobre el edificio más alto de la ciudad, observando todos sus alrededores, como iba a disfrutar esto…
Sus tatuajes comenzaron a brillar mientras tronaba su propio cuello y después masajeaba su hombro.
-Estoy listo…- Dirigió su mirada a su alrededor.
Había un grupo de ahora más Ángeles a su alrededor preparados para luchar mientras Kemono sonreía de oreja a oreja preparándose para disfrutar su parte.

- -0:34 AM- -

-¡Durante las últimas 24 horas, la ciudad de Shinwa  ha sido el blanco de misteriosos sucesos que devastan a su población, se rumorean ataques terroristas o incluso sucesos para no-…- La voz provenía de una reportera en una televisión detrás de un cristal en un puesto de televisores, los noticieros tenían como blanco a la ciudad de Shinwa por los sucesos que ocurrían, los cuales la misma ciudad trataba de disfrazar de atentados terroristas o de simple crimen.
Un chico se mantenía de pie frente al puesto viendo a través del cristal de todas las televisiones las cuales tenían como tema principal a Shinwa.
En las televisiones tenían el tema en todos los ángulos, desde el muelle hasta el casino, los oficiales perdidos, las víctimas y los videos que circulaban en redes sociales.
-[…Extraño, parece haber sido un campo de batalla, una batalla más simple que la de terroristas…Oh quizá solo es mi imaginación.]- Pensó mientras le daba una mordida a una manzana, tenía un cabello entre sus púas revueltas de color verde, sus globos oculares eran de color negro, y sus pupilas eran una mezcla de colores de tono azules, vestía de negro con una chamarra con gorro y pantalones del mismo color.
-Bueno, no es mi problema.- Dijo lanzando el hueso de la manzana por encima de su hombro hasta entrar en un contenedor de basura detrás de él.
Se dio la vuelta poniéndose el gorro de su chamarra mientras caminaba ya dispuesto a irse. En cuanto dio unos cuantos pasos algo lo detuvo… No sabía explicarlo. Pero era una sensación de que algo se aproximaba, volteó por completo hacia la dirección de donde venia lo que le causaba esa extraña sensación.
-…Seguro es mi imaginación.- Se dijo a sí mismo dispuesto a volver a darse la vuelta, pero antes de hacerlo el sonido de una gran cantidad de personas corriendo de aquella dirección lo hizo mantener su vista haya, se podían ver pequeñas explosiones, sonidos de disparos y luces púrpura mientras la gente corría aterrada fuera de aquella zona.
Se sorprendió por ello, dio un salto sobre un auto estacionado para después impulsarse hacia uno de los postes de luz y comenzó a saltar de poste en poste hacia aquella dirección para evitar la estampida de personas corriendo.
En cuanto llego se detuvo viendo con asombro como aquella bestia estaba causando destrucción mientras luchaba con lo que parecían ser Ángeles, a su vez se podían ver patrullas de oficiales comunes abriendo fuego a la bestia y Ángeles mientras luchaban.
El peliverde estaba algo asombrado, juraría haber visto algo similar en los videos que pasaban en aquel puesto de televisiones….No podía evitar pensar lo obvio, quizá esas cosas querían hacer lo mismo en esta ciudad.
Fue sacado de sus pensamientos cuando el cuerpo de un Ángel fue lanzado hacia su dirección por lo que saltó del poste evitando que un cuerpo le cayera encima.
Mientras tanto la bestia, Kemono, se encontraba arrancando las alas de uno de los Ángeles con los que luchaba, en cuanto las arrancó pisó su cabeza haciéndolo atravesar el suelo.
Otro trató de atacarlo por detrás pero Kemono saltó haciendo una mortal hacia atrás dejando que el Ángel pasara por debajo de él, Kemono cayó de pie a sus espaldas y le dio un fuerte codazo en la espina dorsal derribándolo al instante. Los pocos oficiales que quedaban habían decidido retirarse mientras llamaban refuerzos.
Kemono los ignoro por completo, si querían ser lo suficiente estúpidos para hacer lo mismo que en Shinwa era su problema, solo sentenciaban sus propias muertes después de todo. En cuanto noto que había acabando ya con la mayoría de los Ángeles mientras había otros regados por el suelo herido gravemente sonrió de forma siniestra.
-¿Es todo lo que pueden mandar los "GRANDES" seres que mantienen la paz en la tierra?- Se burló enfatizando la palabra "grandes" mientras caminaba en dirección recta rematando a los Ángeles heridos ya sea con un golpe o una patada.
El chico de cabello verde se encontraba observando manteniéndose oculto… Estaba indeciso, esto no era su problema y no tenia porque intervenir a ayudar, además de que podía notar cómo sería un obvio suicidio… Pero ver toda aquella destrucción, todas esas personas morir tratando de escapar y aquellos Ángeles morir en balde lo hacían querer reaccionar, ver como los heridos morían sin piedad alguna… Debía hacer algo por lo menos para ayudar.
Pero alguien se le adelanto, una rápida flecha de luz salió disparada hacia aquella bestia impactando su frente haciéndolo doblar su cabeza hacia arriba por el impacto de la flecha la cual hizo un estallido al chocar contra él.
Mantuvo su mirada al cielo por unos segundos para después bajar la cabeza dirigiendo su atención hacia la dirección por donde había venido el disparo de la flecha.
Una chica vestida con una bufanda pequeña violeta, blusa morada, pantalones blancos y botas café, de piel clara, ojos rojos y un cabello azul largo con mechones morados, se encontraba a la distancia extendiendo sus dos alas grandes y blancas, con un arco en mano.
Kemono bufó viendo a aquella chica, una simple niña se atrevía a tratar de enfrentarlo… ¿Qué les pasa a los de allá arriba para mandar a este tipo de personas a enfrentarlo?
-[¡Estúpida!  ¿¡Qué trata de hacer!?] -Pensó el peliverde mientras observaba exaltado.
Aquella chica comenzó su correr hacia su dirección disparando flechas similares a la primera, la bestia corrió mientras usaba sus manos para desviar las flechas, con ayuda de sus brillantes tatuajes, atrapó una de las flechas la cual se torno oscura, la giró sobre sus dedos antes de usarla para tratar de apuñalar a la chica de cabellos azules, quien dio un salto a tiempo quedando arriba de su brazo, trató de golpearlo con su arco pero Kemono fue más rápido logrado agarrar el arco, jaló de este para tirarla contra el suelo haciéndola estamparse pesadamente contra el suelo.
La obligó a soltar el arco y después lo uso contra ella poniéndolo en su cuello asfixiándola.
Pataleaba sus pies con fuerza tratando de encontrar una manera de liberarse, incluso tratando de usar sus alas pero era inútil, la fuerza física de aquella bestia era mayor, era imposible para ella escapar.
No pudo resistir más, el de cabellos verdes salió disparado hacia la bestia, no podía seguir viendo esa escena sin hacer nada.
Sus brazos estaban electrificados, por todo su brazo se podía ver electricidad recorrerlo para preparar el golpe que liberaría a la chica. Para su desgracia Kemono logró verlo a tiempo sujetando sus dos puños con sus palmas, el lado bueno fue que soltó a la chica quien cayó tratando de recuperar el aire mientras agarraba su cuello.
-…Me estaba preguntando a qué hora ibas a salir, o a escapar.- Kemono dijo sonriente de verlo, lo cual causó una cara de sorpresa y horror entre el chico. -Oh si, sabía que estabas escondido… ¿Por qué crees que estaba ahorcado a esa chica? Quería ver si eras capaz de salir o de huir…- Bufó manteniendo una sonrisa cínica.
No supo en qué momento lo vio, o quizá no se escondió bien, pero ahora era más importante tratar de escapar que pensar como lo vio.
En un intento desesperado mando a través de sus brazos la electricidad que había creado de los mismos, aunque parecía tener efecto, podía notar cómo era capaz de resistir mientras presionaba más sus brazos.
Kemono estaba disfrutando como aquel chico trataba de salvar su vida desesperadamente.
La electricidad aumentaba, causando cansancio en el peliverde quien sentía debilitarse mientras se forzaba cada vez más a aumentar su ataque eléctrico.
Aquella chica se encontraba débil por la falta de aire, por lo que sólo podía ver sin poder hacer nada, no había tampoco signos de haber algún Ángel más por lo menos hasta el momento.
Sin embargo, a la distancia se podía ver a un sujeto más, de cabello café, ojos púrpura, vistiendo un pantalón negro y un chaleco corto sin mangas de color rojo, mantenía la mira a través de un francotirador viendo lo que sucedía, trataba de tener un tiro perfecto,  pero le era imposible por la electricidad y las chispas que saltaban.
Bajo el francotirador y salió corriendo hacia aquella dirección a toda velocidad.
Kemono notó como se aproximaba aquel castaño, por lo que soltó al de cabellos verdes de forma instantánea, lo pateó hacia la izquierda haciéndolo caer de forma pesada, para ahora dirigir su total atención al que se aproximaba.
Sus intenciones eran claras, iba a acabar con el que venía de forma inmediata para después seguir divirtiéndose. Cuando estaba listo para recibirlo con el golpe, no se espero que este castaño, predijo su movimiento, logrando esquivarlo haciendo una barrida por debajo pasando por en medio de sus piernas. Se confío, y al momento de haberse barrido dejo caer una granada cegadora la cual estalló al instante cegado a la bestia.
El peliverde se cubrió a tiempo del brillo, por lo que pudo observar a la bestia cegada moviéndose con brusquedad, gritando furioso tratando de golpear lo primero que se topará, destruyendo a su paso postes y autos.
-¡Muévete tú y la chica ahora!- Ordenó el castaño dirigiéndose al chico mientras observaba, al hacerlo dirigió su mirada hacia la de cabellos azules quien apenas se recuperaba.
Se levantó de inmediato tomándola de los brazos para ayudarla a levantarse, la sujeto de los hombros y se alejó lo más que pudo sin perder de vista lo que sucedía.
-¡Come esto!- Gritó de nuevo el castaño lanzando una granada explosiva hacia la bestia aun cegada, la cual al caer explotó al instante también justo frente a la criatura.
Pero esta seguida de pie mientras tallaba sus ojos con brusquedad. El castaño lanzó otra granada, pero seguía sin haber efecto, volvió a equipar su rifle y disparo hacia la bestia pero las balas simplemente rebotaron.
Kemono recupero la visión, y dirigió una molesta mirada hacia el castaño.
-… Esperaba que--eh… Saliera algo mejor….- Dijo apenado mientras rascaba su nuca.
La bestia grito furiosa lanzándose para atacar, pero un destello rápido lo volvió a cegar deteniendo su ataque. El peliverde había lanzado ese destello mientras sostenía a la chica.
-Sí yo fuera tú,  me movería también, ¡Andando!-Ordenó ahora él. El castaño volteó unos instantes para ver a la bestia quejarse del brillo mientras sus tatuajes brillaban en parpadeos comenzando a rodearlo en un aura púrpura.
-Creo que no hay mejor opción… - Dijo el castaño para entonces voltearse y dirigirse con los otros dos lejos de la criatura.
En cuanto el efecto comenzó a bajar, miró a los alrededores con dificultad tratando de encontrar a aquellos sujetos, pero no había nada, lograron escapar a tiempo. Furioso rugió liberando más de su aura haciendo una presión a su alrededor que rompió el concreto de la calle.
-..Juguemos a las escondidas…- Fue lo que dijo mientras comenzó a caminar iniciando la búsqueda.
Mientras estos tres, habían logrado esconderse dentro de un pequeño puesto de café vacío debido al caos recientemente iniciado.
El peliverde dejo a la chica en una silla, esta ya estaba mejor así que asintió en agradecimiento, mientras el castaño recargada su rifle de francotirador para después colgarlo en su espalda.
-… De acuerdo, eh, supongo que gracias por sacarnos de esa, pero ya tuve suficiente con estas cosas, ¿Vale? No es lo mío este tipo de cosas así que… Les recomiendo irse, no lo sé, a México, y cambiarse los nombres y jamás en la vida volver a la ciudad…Por mi parte iré a Venezuela y me cambiare el nombre a Guillermo del Toro.- Rompió el silencio el peliverde mientras comenzaba a caminar fuera alzando los hombros.
-… ¿Disculpa?- Los dos restantes preguntaron al mismo tiempo confundidos ante lo que aquel decía.
-Es un consejo. ¿Vieron esa cosa? Esto es de locos y yo aprecio vivir.- Respondió mientras caminaba hacia la salida trasera.
-¡Esa cosa está matando personas y Ángeles con los que trabajo, yo no pienso irme! ¡Lo pienso detener!- La chica se levantó diciendo recuperando por fin la capacidad de hablar.
-Ángeles, criaturas, muertes, esto ya es suficiente extraño para mí, ¿De acuerdo? Además si mal no estoy esa cosa estaba por matarte, lo pensaría dos veces antes de volver a intentarlo.- Siguió hablando deteniéndose por un momentos antes de abrir la puerta.
-No estoy seguro de que tú seas el más indicado para hablar de cosas extrañas, te vi y sabes manejar la electricidad en tu cuerpo, ¿Y te has visto en un espejo? Tienes ojos de Galaxia.- Se metió el castaño a la conversación llamando la atención del peliverde haciéndolo voltear.
-… Y eso ya es suficiente extraño para mi, así que lo mejor es mantenerme al margen de toda esta locura, y como dije les recomiendo hacer lo mismo.- Arqueó la ceja respondiendo ante el comentario del castaño.
-Bueno entonces sigue tú, tu propia recomendación, esa cosa está causando desastres y masacres, además no es algo que alguien solo pueda manejar, así que me quedare aquí.- Terminó de hablar mientras se arrodillada en una rodilla revisando su tobillo derecho en el cual tenía un arma 9mm escondida, la tomo para revisar si tenía el cargador lleno y después lo volvió a esconder.
-Además es una bestia de alto nivel de poder, seguro te encontrará y matará antes de que puedas escapar, más porque lo hiciste enojar.- Remarcó finalizando también la chica.
-¿Y qué planeas que, me de miedo y me quedé con ustedes? Ni lo sueñ-…-Antes de poder terminar el sonido de las patrullas llegando al lugar lo interrumpieron.
Llegaron abriendo fuego al instante, la bestia estaba causando más alboroto aún matando a los oficiales que se le cruzaban, por las ventanas se podían ver cuerpos enteros pero con heridas graves salir volando y patrullas por igual.
El castaño y la peliazul estaban por asomarse pero fueron detenidos por el peliverde al instante.
-¡No es necesario asomarse es obvio que está ahí!- Les dijo jalando de sus ropas hacia atrás.
-Pensé que te ibas.- Fue lo que dijo el castaño ante la acción del chico.
-¡Pues de esta forma no se podría! De acuerdo, no llegare y no llegarán a nada ustedes así, si tienes razón y esa cosa nos estará siguiendo entonces supongo que no habrá alternativa.- Continuó mientras los soltaba y levantaba su mano con el dedo índice levantado igual mientras hablaba.
-… ¿Entonces si te dio miedo?...- Dijo la chica cruzando sus brazos haciendo que el castaño riera un poco.
-… ¡Claro que no!, Pero si tienes razón entonces de nada servirá escapar…- Le respondió con una mirada amarga.
-… Sí, lo tuvo.- Susurró el castaño a la chica haciendo que ambos soltarán unas risitas.
-¡Escuché eso!…- Reclamó señalándolos. El sonido de otra fuerte explosión y disparos más intensos los hicieron volver a lo importante. -¡Bien! A ver…vayamos por pasos, me llamo Derex Arteaga. -Se presentó ante los dos el peliverde.
-Yo… Yo soy Richard.- Se presentó también el castaño rascando su nuca.
-Me llamo Sonia…- Terminó por presentarse la chica. -No es un buen momento para presentaciones, ¿No crees?- Preguntó con obviedad.
-Sí queremos salir de esta el primer paso es saber nuestros nombres. - Explicó Derex. -Ahora, noté algo interesante… Esa cosa parece tener una vista muy perfecta y precisa.- Continuó hablando mientras las explosiones y disparos eran cada vez más cerca y se escuchaban más oficiales llegar comenzando a rodear la zona.
-… ¿Una vista perfecta?- Se cruzó de brazos Richard arqueando la ceja.
-Sí, tu granada cegadora le afecto más de lo normal, incluso el efecto pareció durar más de lo normalmente duraría una, señal que tiene la visión algo sensible, además que vio como te acercabas a la distancia y podía ver todo lo que había a su alrededor.- Finalizó de explicar omitiendo la parte donde la bestia lo vio en su escondite mientras se dedicaba solamente a ver la pelea.
-Hmmm… Eso podría ser útil, pero…- Richard dijo pensativo para después dirigir su mirada hacia Sonia. -Dices que tu vienes con los "Ángeles"- Remarcó entre comillas aquello.- ¿No? Entonces deben saber algo sobre esta criatura, entre más sepamos de ella, mejores ventajas podemos usar a nuestro favor.
-Bueno…la realidad es que no se mucho sobre esa criatura y la información que nos dan es limitada…- Respondió causando una mirada de sospecha en Richard quien arqueo un poco la ceja.-Lo único que sé es que esa criatura fue encerrada en la ciudad de Shinwa...No sabemos cómo, hace unas horas fue liberado de su encierro… No hemos tenido tiempo de hacer algo sobre quienes lo hicieron ya que por ahora lo más importante es capturarlo o eliminarlo pero… -Antes de poder terminar el sonido de patrullas caer volcadas cerca de donde estaban la interrumpió.
-¡Eh--De acuerdo! ¡Entendimos! ¡Pero creo que ahora lo importante es salir de aquí!- Derex dijo notando como se podía sentir a la bestia cerca.
-¡Un momento! Si ese es el caso, entonces no debemos de dirigir a la ciudad de Shinwa, ¡Sí él se mantenía en Shinwa encerrado, ahí debe haber pistas de él o algo que nos ayude!- Richard dijo deteniendo a Derex.
-¿Qué?  ¡Debe ser una broma!- Derex exclamó arqueando la ceja.
-¿Tienes un mejor plan? Lanzarlos a la batalla o correr sin dirección nos condenará.- Recalcó de nuevo ese punto mientras otra explosión se escuchó, esta vez a tan sólo un par de metros a su distancia.
-..Sí, de acuerdo, Shinwa, ¿Has visto las noticias acaso? En esa ciudad están pasando el doble de locuras que suceden aquí.- Continuó Derex argumentando.
-Entonces, es obvio pensar que hay que buscar la fuente antes que se expanda por más ciudades ¿No crees? ¿Si ésta cosa vino de ahí que más no podría salir? Teniendo en cuenta claro, que suceden más cosas fuera de lo normal haya.- Ricardo por igual siguió hasta que una patrulla atravesó la pared del lugar junto con cuerpos de oficiales, los tres se apartaron a tiempo.
-¡Muy bien entendí! ¡Vámonos ya!- Derex gritó a lo que los tres salieron de ahí.
Los tres salieron corriendo del lugar por la puerta trasera, corriendo entre el callejón hasta salir a la calle que los guió hasta la calle de atrás, se podían ver patrullas comenzando a rodear el lugar, los oficiales notaron la presencia de los tres saliendo de ahí, por lo que los detuvieron apuntándoles con sus armas.
-¡Alto! ¡No se muevan o dispararemos!- Advirtió uno apuntando con un rifle de asalto.
-¡Agh! ¡No tenemos tiempo para esto!- Se quejó Derex al ver a los oficiales apuntándoles, pero fuertes golpes se escucharon destrozando las paredes del callejón lanzando escombros por los aires. –Oh-oh, sabe donde estamos, ¡Vámonos, Vámonos!- Gritó de nuevo comenzando a correr con Ricardo y Sonia.
Los oficiales por su parte apuntaron al callejón lleno de polvo de los escombros, no dudaron en abrir fuego al instante al escuchar fuertes pasos acercarse hacia su dirección, de entre todo el polvo, Kemono, salió dando un salto hacia aquellos oficiales.
Mientras los tres corrían a la distancia podían escuchar los disparos y gritos de ayuda de los oficiales mientras se enfrentaban a la bestia.
-¡No podemos tampoco dejarles morir a ellos, son personas inocentes!- Se quejó Sonia mientras corría un poco más atrás que ellos no por ser más lenta, si no por la necesidad de querer regresar.
-¡Tampoco podemos dejar que nos mate a nosotros! ¡Tenemos que salir de aquí!- Gritó respondiendo Derex mientras corría estando más al frente que ellos.
-¡Si nos sigue entonces solo debemos salir de la ciudad, así por lo menos lo mantendremos alejado de los civiles mientras nos dirigimos a la ciudad! ¡Nos encargaremos de perderlo después! -Sugirió Richard corriendo en medio de ambos.
-¡Pues a este paso será totalmente inútil tu plan!- Dijo Derex mientras podía escuchar como los disparos y gritos, pararon solo para escuchar fueres pasos acelerados hacia su dirección.
Sonia se detuvo al instante volteando por todas direcciones hasta ver una camioneta que fue abandonada entre el caos, en perfecto estado para su suerte.
-¡Tengo una idea suban a la parte trasera de esa camioneta!.- Ordenó haciendo que ambos se detengan volteando a verla mientras apuntaba hacia la camioneta.
-… ¿Es una broma no?- Derex dijo sonriendo preparándose para seguir corriendo.
-¿¡Crees que es momento de bromas!?- Gritó exaltada Sonia asustando a Derex. -¡¡Suban ya!!- Volvió a ordenar haciendo que ambos se subieran de un salto a la pequeña plataforma que suelen tener las camionetas de ese tipo.
-¡Si planeas algo que sea rápido, esa cosa ya viene!- Gritó Richard observando claramente a Kemono corriendo hacia ellos.
Sonia no respondió, extendió sus alas de Ángel, sus manos brillaron de púrpura invocando otro arco el que tenía con una flecha, diferente a las anteriores, parecía tener una cuerda. Disparó la flecha a la camioneta, se enterró expandiéndose como si fuera una especie de pegamento resistente, sujetó la cuerda en su cadera y comenzó a volar a gran velocidad llevándose la camioneta mientras Ricardo y Derex iban en esta.
-¡Woah! ¿No hubiera sido más fácil que nos llevarás tu?- Reclamó Derex a Sonia quien seguía volando llevándose la camioneta.
-¡No podría llevarlos a los 2 al mismo tiempo idiota!- Respondió fastidiada Sonia.est
-Creo que en lugar de quejarnos por ahora enfoquémonos en salir de esta.- Intervino la pequeña discusión Richard. Se levantó metiéndose por la ventana al asiento del conductor, ajustó unos cuantos cables así logrando encender el motor, sujetó el volante y la palanca comenzando a conducir para mantener el equilibrio de la camioneta, para que no se vuelque mientras Sonia la jalaba volando, logrando así más velocidad.
Derex por su parte se quedo afuera en la plataforma viendo como la bestia aun se acercaba, y al mismo tiempo se escuchaban patrullas acercarse.
-… ¿¡No podían tener un plan que no llamase tanto la atención!?- Derex se quejo de nuevo aún exaltado.
-¡Primero sugiere uno entonces!- Una vez más Sonia fue la que respondió.
Las patrullas mantenían su atención hacia la bestia que seguía acercándose, notando como las patrullas se comenzaban a rodearlo, sus tatuajes brillaron haciendo que una enorme onda saliera disparada de estos, cortando de manera horizontal las patrullas e igual a los oficiales que manejaban estas, haciendo que choquen entre sí llevándose lo que tengan enfrente a su paso.
-… Eh… ¿Un… Problema menos?- Derex cuestionó viendo aquella escena, extrañado.
Sin embargo la bestia preparaba otro ataque directo hacia ellos.
Derex se puso de pie en la camioneta al instante que la bestia soltó el ataque. Creó una barrera de electricidad lo suficiente amplia para bloquear la onda, pero al chocar hizo una pequeña explosión la cual empujó a Derex hasta casi caerse de la camioneta. Pero logró mantener el equilibrio para evitar caer.
-¡Hey! ¿Te encuentras bien?- Ricardo volteó notando lo que había pasado preparando una de sus armas, por parte de Sonia igual volteó con intensiones de detenerse para intervenir pero Derex alzó la mano deteniéndolos.
-Tsk, yo me ocupo de esto... Concéntrense en el camino.- Les dijo a ambos, pudieron ver la determinación de Derex, asintieron y continuaron concentrándose en el camino.-… ¿Así quieres jugar eh?- Dijo ahora hacia la bestia, preparándose de nuevo con el electricidad en sus manos.
El camino siguió a ese rumbo, Sonia continúo volando jalando la camioneta, mientras Ricardo mantenía el control de la camioneta en el volante y Derex bloqueaba e intercambiaba ataques con la bestia quien se acercaba cada vez más.
Después de unos cuantos minutos así, Derex bloqueó el último ataque cayendo arrodillado jadeando del cansancio por el ritmo de los ataques.
-¿Ya no puedes seguir el ritmo?- Se burló Kemono mientras corría más acercándose a la camioneta a tan sólo unos cuantos metros de distancia.
-B-Bueno cuando lo pones así…- Dijo Derex entre jadeos tratando de ponerse de pie.
En ese mismo instante, Derex tomó la oportunidad para lanzar otro rayo cegador justo al frente de la bestia, haciendo que pierda la vista de nuevo.
-¡Ja! ¿Qué te pareció?- Se burló preparando un ataque con su electricidad haciendo una esfera, lanzándola justo en su frente haciendo un estallido de electricidad, causando que retroceda por el impacto perdiendo el ritmo causando que caiga. -¡Pan comido!- Mantuvo aquella risa burlona mientras se alejaban de la bestia.
-¡Hey! ¿Todo bien Derex?- Volteó Ricardo por unos instantes para ver como se encontraba Derex.
-Todo en perfecto estado, ¡Ahora aceleren para irnos ya de aquí!- Respondió dando golpes a la camioneta con su palma como burla de que aceleraran.
Eso se hizo, ya estaban saliendo de la ciudad y entrando en carretera para dirigirse a la ciudad de Shinwa.
La bestia estaba furiosa, había caído en el mismo truco una vez más, se confío demasiado y ahora él había sido humillado tres veces seguidas, se preparó para salir corriendo detrás de ellos de nuevo pero prefiero detenerse… Otra idea había cruzado su mente.
Notó como el camino que tomaron llevaba a Shinwa, así que ya sabría a dónde irían.
-… Bien, parece que volveré a la ciudad más pronto de lo que pensé… Espérenme, tengo algo especial solo para ustedes… -Se comenzó a reír para después salir corriendo por otra dirección.
Por parte del trío, al notar como la bestia había sido pérdida de vista, dieron una pequeña pausa antes de seguir su camino.
Sonia quitó la flecha y guardo sus alas para después caer sentada recargando su espalda en la camioneta.
-… ¿Lo perdimos verdad?… E-Estoy exhausta… -Dijo mientras jadeaba del cansancio por el esfuerzo que hizo.
-… Eso parece, pero dudo mucho que simplemente se haya rendido así como así... –Respondió Richard mientras revisaba el combustible de la camioneta.- Tendremos que tener la guardia en alto, podría atacar en cualquier momento, incluso ahora… -Terminó de decir mientras a la vez terminaba de revisar el combustible, el cual era suficiente para el viaje.
-Quizá en realidad planea algo más… -Derex dijo sospechoso.- Me quedare aquí atrás a hacer guardia. -Agregó acomodándose en la plataforma.
-Bien, entonces no perdamos más tiempo y vámonos ya. -Finalizó la charla Richard dándole la mano a Sonia para ayudarla a levantarse pues seguía exhausta.
Ambos entraron en la camioneta y continuaron con el camino hacia Shinwa. Hubo silencio por un par de horas ya que aún estaban algo temerosos por la criatura, además de la incomodidad de estar en un auto con personas que no conoces.
Sin embargo Sonia rompió el silencio iniciando una conversación.
-… ¿Así que… Eh… Que hacían exactamente antes de… Meternos en este problema?- Preguntó con algo de nervios a lo que ambos voltearon, Derex desde la plataforma y Richard manteniendo el volante.
-No mucho realidad... -Respondió sin muchas ganas de responder, volteó de nuevo poniendo atención a los alrededores.- Solo--eh… Me entretuve viendo televisión frente a un puesto de televisores…-
-Oh eh… Hehe, supongo que… ¿No había mucho que hacer no?… -Dijo Sonia, tratando de seguir la conversación mientras se rascaba su mejilla algo apenada.
-Eh, sí, se podría decir algo así…- Continuó Derex para después toser un poco ya sin saber que decir.
-…  ¿Y tú? –Preguntó ahora dirigiéndose a Richard.
-… Eh, hacía un pequeño trabajo, nada importante… En cuanto termine con lo mío escuché todo el alboroto, vi a la criatura y a ustedes, el resto bueno ya se lo saben. -Respondió manteniendo la vista en el volante.
-¿Qué tipo de trabajo? ¿Eres un agente secreto o algo así? Mira todo el armamento que tienes. -Habló Derex metiéndose ahora con algo más de confianza a la conversación.
-… Sí, uhm, se podría decir que… Algo así, aunque no es muy importante. -Volvió a hablar Richard en respuesta a Derex.
-Es un poco gracioso hace un par de horas nos hablamos con toda naturalidad y ahora no sabemos bien que decir.- Sonia dijo cambiando el tema haciendo una pequeña risa nerviosa.
-Bueno en esos momentos nuestras vidas corrían peligro, supongo que era natural, somos desconocidos después de todo… Aunque pensándolo bien seguimos estando en peligro pero bueno, ya sabes… Una situación más calmada. -Volvió a decir Richard ahora haciendo una leve sonrisa.
-Urrr… Bueno, supongo que en ese caso nos podemos conocer mejor… Estaremos metidos en esto por un rato después de todo… -Derex continuó también sonriendo un poco igual.
El ambiente estaba volviéndose más animado.
-… Pero aún así, uhmm… ¿Sonia, verdad? -Richard pregunto a lo que ella asintió en respuesta.- ¿No saben nada de esa criatura de verdad?… -Pregunto de nuevo.
-No… Verán, lo poco que yo sé, es que esa criatura es un peligro enorme para la vida entera… Estuvo encerrado por miles de años por los 7 Arcángeles, no sabemos aun como fue que salió de su encierro pero la única manera era que alguien rompiera el sello… Pero no hemos dado con los responsables,  esto está causando conflicto y desconfianza, nos ordenan capturarlo pero solo hemos fracasado... -Respondió notando su voz un tono de tristeza por lo que sucede.
-… ¿Y porque los Arcángeles no vuelven a sellarlo en ese caso?- Hizo otra pregunta Richard.
-Cómo dije… Causa conflicto, están teniendo problemas con el consejo del cielo, no se les ha dado la orden de intervenir, por lo que queda como obligación nuestra tratar de detenerlo. - Explicó cruzando sus brazos.
-… Entonces eso puede explicar el por qué no intervienen… Sin embargo deja más dudas también.-Dijo Richard manteniendo una cara de sospecha mientras analizaba la situación.
- Hey, eso no importa ¿Vale? Si ellos no pueden nosotros lo haremos.- Derex intervino tomando por sorpresa a los dos.
-¿Y ese cambio de decisión? Creí que ni querías estar aquí en primer lugar.- Sonia dijo formando de nuevo una pequeña sonrisa.
-Bueno, no queda de otra ¿No? Además creo que me están empezando a caer bien.- Respondió regresando la sonrisa.
El viaje continuó teniendo un ambiente ya más relajado, claro sin bajar la guardia.

- -Entrada a la ciudad de Shinwa- -
- -3:30 AM, 5 de Abril 2012.- -

-¡Bien! ¡Hemos llegado!- Richard dijo viendo la entrada a la ciudad ya frente a ellos.
-Ufff… Y todavía no hay señales de esa criatura…- Derex dijo igual aun viendo los alrededores por si algo sospechoso ocurría.
-… Bueno, en todo caso no habrá que bajar la guardia, así que mejor vaya-… -Antes de que Sonia pudiera terminar las llantas del auto fueron ponchadas en un instante alterando a los tres.
-¿Eh? ¿¡De dónde salió eso!?- Derex dijo viendo los alrededores tratando de ver algo pero le era imposible.
-¿Fue la bestia?- Preguntó Richard abriendo la puerta mientras preparaba su francotirador a la vez que salía rápidamente.
-Bueno, no sé quien más nos haya seguido. -Respondió con sarcasmo Derex  para saltar de la plataforma hacia abajo.
-No siento su presencia ni su olor, ¡Es alguien más! -Sonia dijo saliendo también mientras preparaba su arco con un par de flechas.
Sin embargo al momento que los tres salieron entre los arbustos salieron disparados múltiples sujetos encapuchados moviéndose a una gran velocidad tomando por sorpresa a los tres antes de siquiera poder contra atacar.
Cada uno fue derribado al instante de un golpe directo al abdomen el cual paralizó sus extremidades dejándolos inmóviles.
-¡W-Woah! ¿¡Qué sucede ahora!? -Reclamó Derex tratando de moverse mientras era atado con cadenas que curiosamente resaltaban un brillo dorado.
-¡S-Suéltenme!- Se quejo Sonia mientras era atada también.
-¿¡Quiénes son!? ¿¡Vienen con la bestia acaso!? ¿¡Oh que son!?.- Lleno de preguntas Ricardo mientras era atado por igual.
Los tres finalmente fueron encadenados y los arrodillaron en fila horizontal.
-… Las preguntas aquí las haremos nosotros… Ahora díganos ustedes ¿Qué hacen aquí, y que saben de la "bestia"?. -Pregunto una voz femenina mientras se acercaba hasta llegar frente a los tres.
Tenía un cabello gris, uno de sus ojos era púrpura y el otro naranja, vestía una pequeña bufanda blanca, una blusa roja conectada a un vestido largo café con blanco, en cada mano un guante de color diferente que llegaba hasta el ante brazo siendo café y blanco respectivamente.
-… ¿Eh? ¿Tu quien eres? -Preguntó Richard observando a la mujer.
Antes de responder, sacó una Oz girándola con rapidez en una sola mano para después poner el filo en su barbilla, asustando a Sonia y Derex, sin embargo sólo dejó el filo en su barbilla sin hacerle daño.
-… Elio Corpse… Ahora respondan…-

-To be Continued.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Translate