- -3:45 AM, 5 de Abril 2012- -
-Será mejor que hablen de una vez por las buenas… O los haremos hablar por las malas.- La chica de nombre Elio amenazó mientras sostenía el filo de su Oz en la barbilla de Richard.
-… ¿Sabes? Tratar de forzarnos a hablar nos hará desconfiar más, por lo que menos diríamos algo. -Fue lo que respondió mientras podía sentir como el filo amenazaba cortarlo.
-¿Quieres apostar acaso?… Créeme tengo muchos métodos para hacerlos hablar… -Volvió a decir Elio presionando más, causando un leve corte.
Derex y Sonia forcejeaban las cadenas tratando de liberarse inútilmente.
Sonia dejo intentar al observar como Derex, por más que intentaba usar su electricidad, no podía, por lo que miro detenidamente las cadenas inspeccionándolas. Al hacerlo se percató del tono dorado que tenían por lo que las identificó.
-¡Es-Esperen! ¡Por favor! -Los interrumpió haciendo que cada uno la mirará.
-¿Entonces piensas hablar? -Elio formó una sonrisa de satisfacción quitando el filo del cuello de Richard.
-Claro, les diremos lo que sabemos, podemos trabajar juntos. -Le dijo Sonia sonriendo con algo de calma alterando a Derex y Richard.
-¿¡Qué!? ¿¡Acaso estás loca!? -Reclamó Derex haciéndolo forcejear más las cadenas.
-PFFF…HAHAHAHA. -Elio soltó fuertes carcajadas sujetando su estómago, su risa duro unos segundos hasta detenerse en seco y ahora poner el filo sobre Sonia. -… ¿Y qué te hace creer eso? -Preguntó de manera amenazadora sosteniendo con firmeza el filo sobre su cuello.
-… Porque ustedes son exorcistas ¿Verdad? Lo reconozco por las cadenas... Son dadas a los exorcistas para poder contener las habilidades de sus oponentes como sus poderes o factores curativos. -Respondió aun calmada, confiándose de su respuesta.
-… ¿Y qué tiene eso? Que seamos o no exorcistas y que sepa para que son las cadenas no cambia nada...- Respondió.
-¡Lo sé porque yo soy un Ángel! Fui de… Eh, los que fueron enviados para detener a la bestia, y fallamos… Ellos dos también se toparon con la criatura y me salvaron, ahora sólo tratamos de buscar una forma de detenerla. -Dicha respuesta de Sonia hizo abrir los ojos de Elio por la sorpresa… ¿Esa chica era un Ángel?
-...Libérenlos. -Ordenó Elio después de unos segundos de silencio, a lo que los encapuchados obedecieron liberándolos de las cadenas.
Derex y Richard intercambiaron miradas unos momentos al verse libres por fin, para después mirar a Sonia levantándose, siendo liberada de aquellas cadenas, igual dando un suspiro de alivio.
-Creo que una pequeña explicación ante toda la situación no estaría mal ¿No? -Elio dijo dándoles la espalda para después empezar a caminar haciendo señas de que la siguieran.
Mientras caminaban cada uno comenzó a explicar la situación que vivieron hace unas horas por el ataque de Kemono en la ciudad, y los estragos que causó, junto con las muertes de los Ángeles que trataron de detenerle.
-…Ya veo, ¿Entonces vienen a Shinwa para tratar de investigar más sobre la bestia? -Elio dijo después de escuchar y procesar todo lo que le explicaron.
-…Efectivamente, aquí es donde despertó después de todo, aquí debe haber algo que nos ayude a contraatacar. -Respondió Richard asintiendo.
-En ese caso yo los voy a acompañar. -Elio dijo mientras se detenía volteando a verlos.
-… ¿Tú? Un momento ¿Por qué irías a acompañarnos? Además si tienes a estos tipos contigo y… -Derex decía arqueando la ceja mientras miraba alrededor pero fue interrumpido,
-Veras yo no soy una exorcista… Solo estoy encargada de ellos y órdenes, el trabajo que se les dio a los exorcistas fue cuidar todas las salidas de la ciudad, como ustedes sabrán la bestia fue despertada pero obviamente no pudo haber destruido los sellos sola, hay más personas involucradas… -Fue lo que respondió mientras cada uno atentamente.
-Suena algo lógico, pero entonces creo que ya deberían haber encontrado alguien más aparte de nosotros ¿No es así?… -Richard pregunto de nuevo.
-La cosa es, que no tenemos mucho tiempo de haber llegado, los Exorcistas trabajan para la Iglesia, la Iglesia para el Cielo, se sabe que han estado teniendo conflictos y la orden fue apenas dada hace poco, son los primeros y hasta ahora los únicos con los que nos hemos topado. -Volvió a responder Elio.
-… Hmmm, eso tendría algo de sentido ¿Pero no se supone que tú eres la que les manda a ellos como para venir con nosotros? -Ahora preguntó Derex.
-Sí, pero ya están cada uno en sus posiciones puedo darle el cargo temporal a alguien e ir con ustedes, después de todo tienen una conexión con la bestia y sería tonto no aprovecharlo ¿No creen? -Finalizó la respuesta con una pequeña sonrisa.
-Bien, ¡De esa forma es mucho mejor y más conveniente! -Sonia dijo alegre juntando las palmas de sus manos caminando hacia Elio para ir junto a ella.
Al caminar juntas se apartaron un poco de ambos chicos quienes seguían caminando pero a un paso más lento que ellas.
-…No estoy seguro de poder confiar en alguien que nos ató con cadenas y amenazó… -Dijo Derex hacia Richard sin siquiera voltear a verle.
-…Yo tampoco estoy muy seguro, pero trabaja con exorcistas que están involucrados en esto, ¿No? Supongo que no perdemos mucho tampoco… Y quizá sea de ayuda. -Respondió Richard aún caminando pero solo dirigiendo su visión a él sin voltear.
-…Eso supongo. -Volvió a decir aún no sintiéndose muy seguro, miró hacia las chicas quienes se detuvieron por unos instantes.
Al parecer Elio conversaba con uno de los exorcistas, aparentemente a quien le dejaría el cargo temporal, el exorcista asintió y regreso a su puesto.
-[Aún así la tendré vigilada por alguna duda…] -Pensó Derex y apresuró el paso junto con Richard para alcanzarlas.
Así, los cuatro comenzaron a adentrarse en Shinwa a pie.
-¿Saben? Hubiéramos tomado la camioneta en lugar de venir a pie. -Dijo Derex con un tono de fastidio.
-No seas flojo, ya estamos en la ciudad y creo que a pie sería más fácil explorar. -Le regañó Sonia mientras caminaba más adelantada que el resto.
-Además, la seguridad en la ciudad está muy elevada, sólo hay oficiales y miembros de fuerzas armadas por las calles, la camioneta hubiera llamado la atención… Y no creo que queramos problemas con ellos ¿Verdad? -Elio dijo apoyando a Sonia.
Derex solo gruñó en voz baja mientras caminaba por la respuesta, mientras Richard no decía nada pues estaba muy concentrado en sus pensamientos por lo que ocurría, lo principal… ¿Si tan protegida estaba la ciudad, por qué en esta zona no había nadie? Estaba completamente vacía, y no parecía que estos exorcistas tuvieran relación con la policía... ¿Donde estaban esas supuestas patrullas?
De pronto, el sonido de una fuerte explosión los hizo voltear.
No tan lejos se podía ver lo que parecía ser una prisión del cual se escuchaba mucho alboroto, gritos, y muy pocos disparos que en sólo un par de instantes se detuvieron, sólo para escucharse otra fuerte explosión.
-… ¡Woah! ¿Eso es una prisión?- Se sorprendió Derex mientras observaba y escuchaba el caos viniendo del lugar.
-… Lo puedo oler… ¡La bestia esta en ese lugar! -Sonia exclamó apuntando a la prisión, de la cual todos esos sonidos de la nada se detuvieron dejando un perturbador e incómodo silencio.
De la nada se empezaron a escuchar risas que perturban más el ambiente, aquellas risas hacían eco por todo el lugar.
Los cuatro comenzaron a avanzar con cuidado de nuevo manteniendo la guardia por cualquier cosa que pudiese suceder…
- - Prisión de Shinwa - -
- -4:34 AM, 5 de Abril 2012- -
Dentro de la prisión había manchas de sangre por todas partes, pieles tiradas y uniformes rotos, había un largo camino de sangre que llegaba hasta una de las celdas donde la bestia Kemono se encontraba viendo entre la pequeña entre las rejas los tres chiquillos que se habían atrevido a burlarse de él.
-… Adelante, vayan por ellos. -Dijo en seco causando que las risas volvieran a sonar, esas risas provenían de aquellos reos que ahora estaban deformados y sin piel teniendo rasgos de Demonios, en el centro del pecho de cada uno había un agujero por el cual se podía ver una esfera pequeña de color violeta girando.
Estas criaturas rompieron la pared de la prisión y comenzaron a correr hacia la dirección de los chicos como una estampida mientras Kemono reía.
Más dentro en la prisión en una puerta muy bien resguardada, donde parecía ser la zona de interrogación, se podían ver dos agentes al frente de la puerta muertos en el suelo, dentro de la habitación se encontraba nada más y nada menos que Frank abrazando sus piernas en una esquina.
-… H-Haha… Hahaa… ¡E-Esos si son actos!… ¿V-Verdad? -Hablaba solo por los nervios tras escuchar todo lo que había sucedido.
- -Fuera de la prisión.- -
- -Misma hora y fecha.- -
Tras ver como la pared fue derrumbada los cuatro comenzaron a correr de aquella horda de criaturas deformadas que ya no eran humanos mientras Kemono salía de aquella pared caminando por la dirección a la que iban con suma tranquilidad.
-¿¡Qué decían de la camioneta de nuevo!? -Reclamó Derex mientras corría al lado de Sonia quien le respondió con una mirada de pocos amigos por su comentario.
-¡Mejor concéntrate en escapar! -Gritó Richard volteando a verlos pues era el que iba enfrente de todos.
Los cuatro continuaron corriendo con la mayor rapidez que podían pero era inútil, esas cosas los estaban alcanzando.
-¡Me parece que no tendremos otra opción más que luchar! -Comentó algo alarmada Elio volteando a ver igual como esas cosas los estaban alcanzando.
-¡Bien, si no queda de otra...! -Derex se detuvo dejando que el resto avance cargando sus brazos en electricidad, para después soltar ráfagas eléctricas que impactaron a la mayoría de las criaturas reventándoles diferentes extremidades.
-No son tan du... -Antes de que pudiera terminar se volvieron a levantar formándose de entre los restos de diferentes formas volviendo a correr hacia su dirección.
Derex maldijo y comenzó a correr de nuevo tratando de escapar pero lo estaban alcanzando.
Sonia y Richard se detuvieron preparando su arco y rifle respectivamente de cada uno, dispararon al mismo tiempo sus flechas y balas deteniendo a los que estaban por atrapar a Derex dándole oportunidad de adelantarse.
Una de las flechas de Sonia impactó justo en una de las esferas que se encontraban en su pecho, así haciéndola colapsar mientras burbujas crecían de su cuerpo estallando, destruyendo cada parte, dejando sólo pedazos.
-… ¡Hey! ¡Miren! Esa cosa murió al darle en esa esfera! -Dijo antes de volver a correr junto a Richard y Derex.
-¿La esfera eh? Ese es su punto débil entonces. -Richard dijo mientras corría. -Pero es claro que no podemos arriesgarnos a detenernos y darles uno por uno sin que nos atrapen. -Agregó aquello último para después tratar de concentrarse en un plan.
-Un momento, creo que tengo algo en mente. -Elio interrumpió los pensamientos de Richard mientras el resto la miraba esperando su idea. -Eres un Ángel. -Se refirió a Sonia mirándola. -Puedes volar, quizá podríamos hacer un ataque aéreo.-
-¡No puedo llevarme a los tres a la vez para hacer algo así! -Respondió quejándose por la idea.
-¿Tres?… -Preguntó aún corriendo para después soltar una leve risa. -¿Quien dijo que debías llevarnos a los tres? Sólo necesitas llevar a uno, yo llevaré al otro. -Dicho esto dejó confuso a los chicos, hasta que entendieron a que se refería, pues de su espalda dos alas se extendieron.
Ya no fueron necesarias las palabras, Sonia asintió y extendiendo las suyas. Elio sujetó a Derex y Sonia a Richard para después comenzar a alzar vuelo, justo cuanto ambas estaban elevándose a una altura que se pueda considerar segura, las criaturas comenzaron a hacer saltos enormes para evitar que pudieran salir de su alcance, Richard apuntó con su rifle pero una de las criaturas saltó hacia su dirección sujetando su rifle, pateó tratando de apartarla pero al ser inútil no le quedó de otra más que soltar el rifle dejándola caer.
-… ¡Ugh! Ahí va mi rifle favorito. -Se quejó viendo su rifle caer entre todas esas cosas.
Otra más salto por la espalda de Sonia sujetando sus alas para así doblarlas, causando que soltará a Richard y comenzará a caer por no poder volar adecuadamente.
-¡Diablos no! -Gritó Derex viendo como ambos caían a la vez que atacaba a las criaturas, que saltaban hacia él y Elio. -¡Haz algo no podemos dejarlos ahí! -Reclamó Derex a Elio quien se movía de manera brusca tratando de evitar ser atrapada también.
-¡No puedo hacerlo! No es tan simple cuando estas cosas te están queriendo derribar. -Reclamó aun moviéndose para esquivar a cada criatura que saltaba, sin embargo Derex sólo se quejó con la lengua tratando de soltarse.
-¿¡Qué haces!? ¡No te muevas así!-Le reclamó Elio.
-¡No pienso dejarlo haya! -Fue lo que dijo hasta hacer un último movimiento brusco para lograr zafarse de Elio y caer entre las criaturas.
Debido a esto Elio bajó la guardia, por lo que fue atrapada por dos criaturas que lograron atraparla haciéndola caer.
Entre la multitud de criaturas, Richard era golpeado de manera violenta mientras se encontraba cubriendo con su cuerpo a una herida Sonia para evitarle más heridas, se podía ver destellos de electricidad salir de la luz, donde se encontraba Derex luchando con sus puños electrificados con casa criaturas tratando de acercarse hacia sus recién conocidos colegas… Hace unas horas simplemente quería dejarlos e irse, apenas y los conoce, pero ahora estaba ahí queriendo ayudarlos, queriendo salvarlos. La dulce ironía.
Muchas criaturas lo golpeaban conforme se acercaba y él regresaba el golpe aun más pesado, evitaba los golpes que podía haciendo saltos giratorios cortos, pasar por debajo de ellos o burlarlos para hacerlos golpearse entre sí, pero eran demasiados como para poder durar mucho tiempo así.
Terminó siendo arrodillado a golpes, aún trató de avanzar, pero era inútil, no podía más sin importar que tanto exigía a su cuerpo moverse, sólo podía escuchar no tan lejos de él a través de todas esas risas los sonidos de Richard quejándose por cada golpe que recibía, tratando de proteger a Sonia, por desgracia no era suficiente pues igual se escuchaban los de ella recibiendo también golpes, eran demasiados para ellos.
Derex comenzó a maldecir mentalmente… Sin embargo fue inesperado para el como logró sentir que recibía menos golpes, al alzar la mirada pudo ver a Elio, quien apartó las más criaturas que podía con sus heridas alas para después tomar a Derex del brazo ayudándolo a levantarse.
Ella también estaba herida, y se le podían ver marcas de golpes fuertes, pero parece que ella tampoco se quería rendir tan fácilmente, una vez de pie Derex asintió y prosiguió a avanzar junto con Elio, atacando de forma mutua contra las criaturas a su alrededor.
Hasta por fin llegar y atravesar la multitud que rodeaban a Richard y Sonia, Derex usó lo poco de energía que le quedaba para hacer un ataque eléctrico al suelo formando un círculo alrededor de los cuatro, así apartando las criaturas que los rodeaban.
-Oh diablos… Mírense… -Derex dijo mientras miraba las heridas de ambos, respiraban con dificultad... Mucha dificultad.
-Debemos pensar en una manera de poder salir de aquí… Mis alas están muy heridas… -Elio dijo mientras miraba a su alrededor, estaban rodeados de aquellas criaturas que comenzaban a acerarse lentamente de nuevo.
Elio se preparaba solo con sus manos pues su Oz se le perdió al momento de caer.
-Maldita sea… ¡No tengo nada en mente! -Gritó Derex apretando su puño comenzó a desesperarse.
En cuanto más se acercaban, más fuertes eran las risas, no había salida ya… Pero esas risas de la nada, empezaron a ser llantos de desesperación, llantos horrendos haciendo que ambos vieran con más atención como la esfera en el centro de cada uno comenzaba a pudrirse, y a consecuencia estas comenzaban a pudrirse por igual, el llanto lentamente se hacía más débil hasta que no había nada más que restos podridos de carne alrededor.
Ninguno de los dos entendía que sucedía, una risa se escuchó al fondo de la calle.
Era Kemono, disfrutando cada momento… En cuanto dejó de reír se retiró corriendo hasta perderse de su vista.
-… Estaba jugando con nosotros… -Dijo Derex observando donde Kemono estaba de pie observándolos. -Y evidentemente… Esto solo fue el inicio…-
La respuesta de Elio solo fue una risa… Una risa nerviosa para después caer arrodillada para reír más aún, en esa risa se podía sentir el temor que le provocó aquel comentario que por desgracia era verdad. No pudo reír más, comenzaba a perder la conciencia, el dolor y el agotamiento la estaban finalmente venciendo, Derex trató de sujetarla pero al hacerlo sólo cayó junto a ella, él también estaba cansado y agotado… No quería caer… Richard y Sonia necesitaban atención urgentemente, pero no pudo más, finalmente cerró los ojos también.
- -???- -
-… ¿Esta muerto?-
…
-¡Papá! ¿¡Esa es gente muerta!? ¿¡Qué te pasa!?-
…
-¡Querido! ¡Estaba tan preocupada por ti!
…
-¡Todo está bien yo… Yo se los explicaré…-
…
- -5:30 AM.- -
Derex finalmente despertó, al despertar recordó todo lo que había sucedido, así que volteó por todas direcciones solo para encontrarse en una habitación, una habitación muy acogedora, elegante, con decoración… Algo regular.
Una habitación evidentemente de huéspedes.
Se levantó al instante viendo que estaba completamente vendado, ahora tenía sentido, evidentemente alguien los debió haber ayudado… Derex se sintió con suerte por lo que soltó una risa, pero en ese instante recordó a Kemono, aún seguían en peligro, se dirigió hacia la puerta abriéndola de manera brusca golpeando así a alguien.
-¡Au!- Se escuchó un grito femenino seguido del sonido de una caída pesada y cosas caer también.
Derex salió de prisa a ver que había una chica de no más de 17 años de edad sentada en el suelo por la caída con un plato hondo en la cabeza derramando todo el cereal que estaba en este sobre ella.
Vestía ropa casual, blusa rosa mexicano, jeans largos y brazaletes en sus muñecas, tenía una cola de caballo el cual era naranja.
-Yo, uhm… Eh, lo siento, no creía que… -Derex comenzó a decir apenado rascando su nuca para después tratar de darle la mano.
-… No te preocupes, por lo menos despertaste. -Dijo aceptando la mano para después ayudarla a levantarse.
Se quitó el plato de la cabeza dejando caer más cereal y leche, tomó un pequeño trapo de su bolsillo para comenzar a limpiarse.
-Uhm, de veras lo lamento… Pero--eh ¿Te importaría decirme s-… -Antes de poder terminar, Derex fue interrumpido.
-Tus amigos están en la sala, están despiertos desde hace un rato ya, camina por el pasillo para ir a la sala. -Fue lo que dijo la chica aun limpiándose.
Derex asintió aun apenado y camino por el pasillo, era una gran casa, tenia cuadros que parecían ser costosos y una alfombra en el suelo, había por igual demasiadas puertas y diferentes pasillos por lo que estar observando lo terminó confundiendo en el camino ya sin saber por donde ir, parándose tratando de saber por donde ir.
-¿Perdido? No es tan difícil, sígueme. -La chica dijo pasando por enfrente de él haciendo señas que lo siguiera, aunque ya no tenía cereal en la cabeza parecía tener mojada la ropa por la leche.
Derex asintió y camino detrás de ella aun observando la casa hasta finalmente llegar a la sala, en donde estaban Richard, Sonia y Elio sentados y aparentemente algo avergonzados mientras una señora reía junto a un chico de por lo menos 16 quien ocultaba su rostro de la vergüenza y había un tipo en el medio de la sala haciendo poses extrovertidas mientras relataba algo.
-¡Eran 50, no, 100! ¡Ellos estaban tendidos en el suelo, perdidos, y yo llegué justo a tiempo, derrotando a cada uno de ellos con un golpe mortal! -Gritaba haciendo poses de lucha.-Trataron de acorralarme, trataron de hacerme retroceder, ¡Pero fue inútil! ¡Usé mi técnica secreta para hacerlos huir como los cobardes que eran! -Gritó de nuevo poniendo las manos en sus caderas para mantenerse firme soltando una risa de arrogancia.
La chica dio un suspiro golpeando su frente con la palma de su mano mientras Derex miraba arqueando la ceja con una cara de confusión.
-¡Bravo querido, eres todo un héroe! -Dijo la mujer aplaudiendo emocionada con los ojos cerrados ante aquella absurda historia.
-… No me digas que le crees… -El chico se avergonzó más ocultando su cara debajo de su camisa.
-… ¿No creen que quizá morir haya sido mejor opción? -Susurró Elio quien se encontraba sentada en un sofá vendada de la frente y brazos en medio de Richard y Sonia.
-… Lo peor es que estoy considerando que tienes razón. -Respondió susurrando también Richard quien estaba más vendado y moretones en el rostro.
-… Venga no puede ser tan malo… -Dijo Sonia con una sonrisa forzada tratando de no ver lo malo.
-¡Oh, pero miren! -Gritó aquel hombre dejándose ver más claramente, era Frank.- Su amigo despertó, justo les contaba como los salvé, ¿La repito para que la escuchen?- Dijo sonriente Frank preparándose para contar de nuevo.
-¡¡NOO!! -Gritaron todos al mismo tiempo a excepción de aquella mujer.
-Sí Papá… Es que eh, ya hemos escuchado tus grandiosos actos heroicos… Quizá necesiten algo por sus heridas. -Respondió el joven alzando sus hombros sonriendo de manera avergonzada.
-Tienes razón hijo, un verdadero héroe debe atender a los heridos, ¡Whahoohohohoho!- Se río de nuevo mientras aquel chico escondió su cabeza debajo de su camisa avergonzado.
-… En realidad estoy… Bien, muchas gracias. -Agradeció sin muchas ganas Derex.
-¡No hay porque muchachón! -Respondió Frank dándole una fuerte palmada en la espalda.
-¡OUCH! -Se quejó Derex por el dolor, ya que le dio en una de sus heridas por los golpes.
-¡Whoops! Lo siento hehe… -Se disculpó Frank rascando su nuca con una risa nerviosa mientras Derex lo miraba conteniendo sus ganas de golpearle.
Ignorando ya el golpe Derex se acercó hacia los chicos, quienes bufaron un poco.
-… ¿Entonces, nos salvó la vida un mentiroso que aparentemente es millonario? -Preguntó en tono de broma Derex.
-¡Hey! No son mentiras, ¡Es verdad soy un maestro de las artes marciales mixtas!- Frank dijo cruzando sus brazos.- ¡Woyataaaaaa!- Gritó haciendo una mala imitación de patada Ninja rompiendo un jarrón.-Uh… Fue a propósito.-
-Bueno pudo ser peor… Oh eso quiero creer… -Richard dijo viendo como Frank trataba de reparar el jarrón alterándose solo para romper más los pedazos.- Aún así, Derex está despierto, es hora de irnos, les agradecemos su ayuda. -Dijo Richard finalizando para después levantarse, sin embargo con dificultad debido a sus heridas.
-¿Oh? Un momento chicos, no se tienen que ir aun, no parecen estar en condiciones de poder irse, lo que necesitan es un lugar donde poder descansar. -La mujer, hablo llevándose la mano a la mejilla, era de estatura promedio y su cabello era castaño, su piel era tersa y sus ojos verdes, vestía ropa causal por igual, pantalones caqui que llegaban hasta sus tobillos y una blusa de manga larga.
-Le agradecemos su ayuda de verdad, pero realmente nos tenemos que ir…No es muy seguro para ustedes. -Elio dijo levantándose también y ayudar a Richard a apoyarse.
-¿Seguro para nosotros? ¡Tonterías! Lo seguro para ustedes es descansar aquí. -Insistió la mujer poniendo las manos en su cadera.
-Señora eh… -Derex trató de pensar en alguna forma de llamarla.
-Nada de señora, díganme por mi nombre Charlotte. -Dijo sonriente.
-Charlotte, sí, verá… Realmente de lo que su… Marido nos haya…&Salvado&. -Enfatizó entre comillas lo último, resaltando la obvia mentira.- No es nada comparado con lo que realmente lo causó… Y nosotros tenemos asuntos muy importantes que atender, le agradecemos mucho su ayuda, de verdad pero debemos irnos pronto.- Derex insistió por igual, pero no funcionaba, Charlotte mantenía una mirada insistente no queriendo dejarlos ir.
-… Sí, asuntos importantes, venga, no sigan el cuento de mi Papá, sabemos que es un mentiroso. -La chica dijo captando la atención.
-¡Hey!-Gritó Frank quien aun intentaba arreglar el jarrón.
-Un tipo con ojos de galaxia, una chica de ojos rojos pero no es albina, otra que tiene ojos de diferentes colores y ropa con símbolos extraños… Y el único que parece ser normal pero con ropa de agente, y la casualidad más grande es que desde hace unas horas la ciudad ha estado en caos y con patrullas por todas partes por ciertos… Sucesos paranormales que han sucedido.- La chica dijo observando a cuatro.
-Bueno tampoco es algo que tengamos que esconder… Si, se podría decir que indirectamente estamos metidos en los sucesos de aquella bestia de esta ciudad. -Richard dijo en voz seca.
-¡Sí! ¡Lo sabía! ¡La leyenda es real! ¡Y todo esto es causado por esa bestia! -Gritó alegre y sintiéndose triunfadora alzando sus puños.
-No no no, espera un minuto deben estar mintiendo. -Interrumpió el chico a su hermana.
-¡Ja! ¿Realmente crees más posible que Papá derrote a 100 reos él sólo a que estos tipos tienen que ver con la bestia? -Le hizo la pregunta la cual lo dejo muy pensativo…
En ese instante, el sonido del jarrón quebrarse de nuevo los hizo voltear, Frank estaba temblando y tenía una cara de horror formada.
-… ¿Querido est-… -Charlotte quería acercarse pero Frank no se lo permitió alzando su mano en señal de que se detenga.
-…Estoy bien, déjanos a solas a nosotros por favor llévate a Uriel y Eva. -Fue lo único que dijo con una voz quebrada.
Charlotte asintió y se llevó a sus hijos, Uriel y Eva, quienes aunque no querían irse no tuvieron de otra.
Una vez que se fueron, hubo un silencio incomodo por varios minutos mientras Frank recogía los pedazos del jarrón ahora para tirarlos en un cesto de basura.
-… ¿Usted tuvo algo que ver también con la bestia? -Preguntó Sonia rompiendo el silencio.
Frank… Tardó varios segundos en responder, se llevó la mano a la frente tratando de limpiar su sudor por los nervios, hasta finalmente responder.
-… Si, heh… Al principio solo… Hah, creía que era un simple acto… ¿Saben?… Yo… Yo… -Se puso aun más nervioso y para evitar alterarse más se dio palmadas en su mejilla para después suspirar pesadamente tratando de mantener la calma.-… Llegaron estos tipos a mi casino… Quedé inconsciente y cuando desperté todo estaba destruido… Después llegó este tipo queriendo ayudar, creí que… Se refería a mi casino y todo era un acto… ¡Pero llegaron patrullas y entonces lo persiguieron! No supe nada más porque dos agentes me llevaron… Querían preguntarme lo que sabía… Y y… -Una vez más comenzó a alterarse por el resto de sus recuerdos.
-Mantenga la calma… -Dijo Sonia interrumpiendo a Frank para acerarse un poco y tomarlo del hombro.
-… Realmente esperaba que todo fuera un acto… Pero cuando estuve en interrogación, no me creyeron mucho, y continuarían llevándome a prisión como &Última oportunidad&, me interrogaron ahí y si no los convencía seria arrestado haha… Ahí es donde realmente viví algo horrible… De la nada se escuchaban sonidos de disparos… Gritos… Después silencio… Entonces el ruido de una pared colapsar alteró a todos, los agentes que me custodiaban salieron por todo el ruido que había… Esos segundos que abrieron la puerta pude ver… Como esa alta y horrenda criatura tomaba atención los reos y había más a su alrededor pero sin piel… Sólo con… Su carne de fuera… Con risas, horribles risas que penetraban las paredes… Escuché golpes y disparos… Y luego un perturbador silencio… Era evidente que los agentes murieron… No podía moverme, esperaba a mi fin, pero al parecer nada sucedió… Sólo escuchaba esas horribles risas… Hasta que pararon… Me armé de valor y al momento de salir solo había piel… Sangre… -Continuó narrando mientras sus brazos temblaban más, por lo que tomó otra pausa.
-… ¿Les quitaba la piel?… ¿Esas cosas eran reos? -Preguntó Derex de forma que sólo Elio y Richard le escucharon.
-… Eso explica las esferas… Les quito sus almas… Y esas esferas debieron haber sido creadas por su propio poder para mantenerlas con vida y volverlos… Esas cosas… Eso explica también porque de la nada murieron… Les puso un límite de tiempo sólo para jugar con nosotros. -Elio dijo analizando lo que Frank contaba y lo que vivieron hace un par de horas.
Frank, aún algo alterado prosiguió.
-… En cuanto pude salir de ahí los vi a ustedes en el suelo rodeados de restos de carne y con heridas fuertes, así que, sí… Los traje aquí a mi casa donde nos encargamos de sanarlos… Hahaha… Estaba tan aliviado cuando llegué y vi la casa totalmente intacta y con mi familia totalmente a salvo… -Finalizó soltando otro suspiro para poner la mano en su frente.
-¿Espera tú solo nos trajiste aquí? -Preguntó algo impresionado Richard… Realmente nadie le creía que él solo los salvo.
-Sí, no fue nada fácil y más con oficiales por todas partes ¿Saben? -Respondió comenzando a re - cobrar su actitud.
-Bueno realmente se lo agradecemos… Usted nos salvo y tenemos una deuda con usted por ello. -Sonia agradeció sonriente.
-Oh hehe… No fue nada… -Dijo rascando su nuca para después agitar la cabeza y aclararse la garganta.- Quise decir, ¡Claro que no fue nada pequeña solo algo noble por parte del Gran Frank Gomakashi! -Presumió volviendo a su postura y actitud común.
Sonia río un poco nerviosa no queriendo tirarle los dientes en ese mismo instante.
-… De todas formas, nosotros debemos irnos, estamos metidos en problemas con cosa, atacó la ciudad vecina de donde venimos… Y estamos aquí buscando alguna pista que nos ayude a detenerla… Estar aquí solo los pondría a usted y su familia en peligro. -Richard continuó.
-Lo que nos dijo nos puede ser útil además, gracias por su ayuda y eh… Cooperación… ¿Podría decirnos donde esta ese casino suyo? -Elio pregunto a lo que Frank se río un poco nervioso.
-Verán… Ese casino ahora mismo está rodeado de policías y todo eso… Dudo mucho que puedan siquiera acercarse… Pero estoy seguro de que los tipos que vi tendrán algo que ver… Uno era alto con una bufanda café, tenia mechones blancos y una cola… Larga y gris, era el que fue perseguido… El otro era de hielo… Literalmente era todo hielo... Y la otra era una chica simple pero pelirroja, su ropa llamativa pero sencilla la es fácil de reconocer. -Explico Frank a lo que asintieron.
-Gracias de nuevo uhm… -Richard agradeció tratando de recordar su nombre.
-Frank.- Dijo.
-Sí, Gracias Frank, es hora de irnos.-
-… ¿Están…Eh, seguros? Con esas heridas… -Frank trató de hacerlos cambiar de opinión pensando en algo que pudiese decir.
-Estaremos bien… No podemos poner en peligro a su familia y a la gente de aquí por esa bestia… - Insistió de nuevo.
Los cuatro estaban ya preparados para irse, sin embargo un fuerte grito los detuvo, el grito de una chica.
-… ¿Eh? ¡Eva!- Grito Frank alterado por lo que corrió fuera de la sala hacia los pasillos hacia de donde venia el grito.
El resto prosiguió a seguirlo, Derex al ser quien al parecer menos heridas tenia pudo adelantarse junto con Sonia mientras que Elio ayudo en lo que pudo a Richard quien fue el más afectado por los golpes.
El grito había venido del patio trasero de aquella casa, la cual era una mansión con un enorme patio trasero..Más bien un jardín propio.
En el patio estaba Eva en el suelo, afortunadamente no se encontraba herida, sino más bien sucia.
Al frente de ella se encontraba un tipo de cabello naranja, tenía una cicatriz por debajo de uno de sus ojos los cuales eran rojos, de su frente colgaba una antena roja igual que sus ojos, vestía una especie de chaleco sin mangas acompañadas de una bufanda y pantalones largos, con un venda roja en su brazo derecho.
Estaba enfrente de Eva pero dándole la espalda, estaba jadeando un poco, al frente de él había un perro, el doble de grande que uno promedio, sin embargo no tenía piel dejando ver sólo su carne y su cabeza era puro esqueleto con fuego lentamente apagándose.
-… ¿Quién es ese tipo? -Preguntó Elio observando a aquel sujeto quien parecía no bajar la guardia.
-No parece tomarnos en cuenta… Parece más atento a esas cosas… -Dijo Richard observando al cuerpo del perro pudrirse. -Estoy seguro que son creadas por la bestia. -Agregó finalizando.
-¡Eva! ¿Estás bien? -Frank gritaba corriendo hacia su hija para después ayudarla a levantarse.
-Sí yo eh… Estoy bien. -Respondió mientras era levantada por su Padre, en ese instante llegaron corriendo más perros iguales, cada uno saltó pareciendo ir directo a atacar al chico de naranja pero antes de caer sobre él se envolvieron en fuego para desaparecer. Al frente de los chicos el fuego apareció como una esfera y ahí saltaron los perros, encima de ellos atacándolos por sorpresa.
Trataban de morder sus cuellos pero forcejaban tratando de evitar la mordida y quitárselos de encima pero su fuerza era abrumadora sumando las heridas de cada uno.
El chico de naranja se dio la vuelta y monto la espalda de uno sujetando su cuello para presionar, así apartándose de Elio, hizo movimientos bruscos obligando al perro a chocar con el resto para así quitarlos de encima de los chicos.
Uno de los perros saltó sobre su espalda mordiendo su hombro para obligarlo a soltar al otro perro, pero Derex quien ya se puso de pie cargo su brazo con electricidad para golpear al perro quien soltó el hombro del chico pero arrancando algo de piel y de su ropa.
-¡Ouch! ¡Más cuidado! -Se quejó del dolor.
-Uhm, lo siento. -Se disculpó Derex arqueando la ceja.
Los otros perros se pusieron de pie gruñendo, el fuego de sus cráneos aumento y de su boca comenzaron a escupir bolas de fuego directas a Elio, Sonia y Richard.
Los tres se tiraron al suelo evitando recibir los impactos los cuales dieron a los arbustos del jardín.
-¡No! ¡No! ¡El jardín! -Gritó Frank alterado al ver como su jardín se prendía en fuego.
-¡No hay tiempo para eso Papá! -Eva le regaño tomando su brazo y jalarlo dentro de la mansión.
Richard rodó por el suelo ocultándose entre unos arbustos buscando algún arma pero no parecía tener nada, quizá le quitaron las que tenía cuando le sanaron, maldijo internamente al ver que los perros continuaban atacando y no tenía algún arma para contraatacar.
Sonia junto a Elio se cubrieron apartados de Richard, así separando a los perros uno atacaba a Richard y otro a ellas.
Sonia invocó su arco de nuevo con algunas flechas, se preparó y salió corriendo disparando sus flechas al perro las cuales se enterraron en sus costillas haciéndolo chillar. Elio tomó ventaja y salió del lugar saltando sobre el perro en su espalda para tomar dos flechas de las tres que recibió, para enterrarlas en su cráneo haciendo que el fuego se alterara y el perro se moviera de manera brusca chillando por el dolor, Elio las enterró más cruzándolas entre sí en su cráneo finalmente acabando con el perro, el fuego se apagó al instante y cayó de forma pesada.
Elio se levantó limpiando sus manos, ropa estaba algo quemada por el fuego.
-¡Hey! ¿Estás bien? -Preguntó Sonia llegando junto a ella.
-Oh claro, el fuego no es algo que a mí me afecte… -Respondió sin mucha importancia sacudiendo su ropa algo quemada. -Mejor vayamos a ayudar a los demás. -Finalizó, a lo que Sonia asintió.
Richard continuó tratando de evitar los ataques del perro cubriéndose con ayuda del jardín el cual ya estaba haciéndose cenizas limitando sus escondites.
-¡Hey! ¡Quizá esto te sirva! -Se escuchó a un chico hablar detrás de él, por lo que volteo y pudo ver al hijo de Frank, Uriel, en la ventana, lanzando su rifle, Richard lo tomó en el aire y del rifle estaba colgando una pequeña botella que decía &Agua bendita&, Richard miro hacia la ventana al chico y asintió en agradecimiento, tomó el frasco y saco el cargador para bañar las balas con algo de agua bendita, puso de nuevo el cargador y al instante que lo hizo el perro apareció en fuego justo en frente de él.
Al instante que apareció, Richard apunto y disparó a quema ropa el cargador completo sobre el perro el cual comenzó a chillar mientras de los impactos de bala parecía quemarse, comenzó a moverse de manera brusca mientras Richard apuntaba a su cabeza esperando un tiro perfecto, finalmente tuvo en ángulo correcto y disparo la última bala impactando su cráneo, el fuego se apago y su cuerpo callo de forma pesada.
Por el otro lado, Derex evitaba los arañazos del perro que había atacado, mientras el otro chico continuaba montando al otro perro quien se movía de manera más brusca tratando de tirarlo hasta por fin lograrlo.
Al momento de caer cayó justo a espaldas de Derex quien estaba tratando de ver una manera de contraatacar. En cuanto ambos se vieron, voltearon para ver a cada perro preparar otro ataque, así que ambos asintieron y se quedaron quietos esperando. El perro que atacaba a Derex preparó un arañazo y el que seguía a ese chico dio un salto con la intención de caer sobre él, pero ambos se hicieron a un lado, Derex saltando y el chico rodando por estar en el suelo. Así causando que el perro que saltó recibiera el golpe del otro arrancando su cráneo acabándolo al instante.
Derex ayudo a levantar al pelinaranja y ambos vieron como el perro que quedaba comenzó a gruñir con furia, se dio la vuelta al instante corriendo hacia ambos por lo que se prepararon pero antes de caer sobre él se envolvió en fuego desapareciendo para aparecer entre fuego detrás de ellos y derribarlos golpeando sus espaldas.
Puso sus patas sobre ambos para dejarlos inmóviles, pero fue interrumpido por el impacto de flechas en su espalda provenientes de Sonia quien estaba detrás del perro junto a Elio.
Richard llego también recargando su rifle con otro pequeño baño a las balas con agua bendita, así que apuntó y disparó balas sobre sus patas para así hacer que soltará a ambos chicos en el suelo, al hacerlo Derex aun en el suelo, golpeó al perro en el pecho con su puño electrificado para terminar de apartarlo, el perro se encontraba electrificado y herido así que el chico de pelo naranja se levantó preparando y a el golpe de gracia, su antena en la frente se iluminó y su puño por igual en tono de color de su antena haciendo certero y fuerte golpe en el cráneo rompiéndolo para así acabar con el último perro.
Los cinco jadearon por el cansancio unos instantes.
-Si los perros son así de agresivos… No me quiero imaginar al dueño. -Bromeó el chico alzando la mano haciendo que los cuatro lo vieran no de muy buena gana.-Oh vamos la broma fue buena… Oh cierto, me llamo Phiro. -Se presentó.- Para no hacer una larga introducción, estoy aquí por la bestia, la vimos venir por estas direcciones y el resto es fácil de pensar por uno mismo.-
-… ¿Espera &vimos?. -Preguntó Sonia confundida.
-Anary, Andrew y Zeeth… Sólo que nos separamos, esta mansión es enorme.- Respondió pero solo para dejar más confundidos a los chicos.
-De… De acuerdo, gracias por tu ayuda Phiro… -Agradeció Elio quien se encontraba algo aturdida por la lucha y la confusión.
-No hay de que… Aunque esos perros parecían querer ir directo hacia ustedes… Y la bestia estaba aquí… Uhm… -Decía mientras analizaba los hechos.
-Sí Sherlock, tenemos mucho que ver con la bestia. -Derex dijo rodeando los ojos un poco fastidiado.
Así, los cinco comenzaron a conversar de lo ocurrido y las explicaciones sobre la bestia, Phiro no quiso entrar en muchos detalles omitiendo muchas cosas, lo único que se limitaba a decir era que estaban el aquí con otros más por las anomalías de la ciudad y tratar de hacer algo contra ello.
-¿Saben? Creo que deberíamos trabajar juntos, realmente entre más, mejor probabilidades de ganar tendremos… Si está jugando como dicen significa que volverá a atacar. -Phiro dijo poniendo su mano en la barbilla mientras tenía un brazo cruzado.
-Supongo que… Tienes razón, ahora mismo nosotros somos juguetes para él, a este paso solo moriremos.- Richard dijo pensando la situación también.
-En ese caso creo que está claro ya, vamos iremos por Anary y los demás, seguramente siguen buscando por alguna parte, los encontraremos, trataremos esas heridas de forma rápida y después veremos que planear, síganme. -Finalizó la plática Phiro dándose la vuelta para comenzar a caminar, así que los chicos le siguieron.
Después de unos minutos, Frank salió junto a su familia al jardín para tratar de averiguar el por qué de tanto silencio de la nada.
-Oh cielos… Mira el jardín. -Charlotte dijo sorprendida al ver el jardín totalmente carbonizado.
-Esta si es una historia que deberías contar Papá… -Uriel dijo viendo la escena. -Lastima que parece que ya se fueron, esperaba hacerles unas preguntas.-
-… ¿Papá? -Pregunto Eva viendo a su padre quien se encontraba pálido viendo todo.
-….¡¡¡MI JARDIIIIIIIIIIIN!!!-
-To be continued.